Caminamos a tientas , a ciegas
Solo destellos de ternura y emoción
Solo el brillo de los ojos amados, amantes
Pueden guiar nuestros pasos titubeantes
Pueden orientar desvaríos y pasiones
De nuestros temores y horrores
Solo las manos tersas del destino
Pueden acaso protegernos con sigilo
De las sombras, de las profundidades
Del desamor y el desamparo.
Son nuestras limitadas percepciones
O también nuestras imperfectas existencias
Las que definen o condenan a nuestras pasos.
Nuestros rastros , sobre aquellos lienzos ajenos.
Ajenos por no ser propios, por no pertenecernos
mas somos dueños de las huellas y sus secuelas.
Sin embargo, sobre todas las hercúleas debilidades,
Emergen orgullosos los deseos y los sueños
Sumergiendo, enterrando, las conciencias,
los decretos, los mandatos de otros tiempos
Soñando y deseando caminamos, sin rumbo
a nuestro destino: el final o el principio. ..
Seguiremos caminando, descubriendo, confirmando
A cada paso, con fantástico desparpajo
Que la vida es el camino, un mágico proceso,
la sincronía que no conoce lo casual, lo sin sentido.
Y en sus recodos, nos esperan dulcísimos eventos.
Maravillosos presentes de inmerecida opulencia.
Caminamos y a cada paso, descubrimos la sustancia
Que nos define y nos confirma. Nos compromete
Que nos condena y exonera al mismo instante.
El contenido que eleva al continente, lo mejora.
0 acaso tristemente, nos sentencia al descontento.
Nuestros pasos, a los hechos consumados nos enfrentan .
Gloriosos trazos, pintados con pasión sin compasión
Afirman estruendosos, que por estos lares transitamos
Que por estas lides, batallamos desarmados, descarnados
con dragones de fuego y egoismo
Que batallamos sin reparos, con la rutina y el olvido
Y nos rendimos al amor y sus embajadores
JZ- Enero 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario